domingo, 6 de septiembre de 2009

piove!

Anoche me dormí y llovía. Lluvia amable y tranquilizadora, lava las calles y las penas. Y moja a todo aquél que se deja.


Hoy desperté y llovía. Sonó mi despertador tempranito y nomás le dí un manotazo y le mandé un sms a mi hermano para desearle éxito en su examen, me acomodé y me volví a quedar dormida. Pero entre sueños alcancé a escuchar la lluvia, y que rico se siente que la lluvia te acompañe. Somos amigas desde hace tiempo. Ella llueve para regar los campos y para que yo no llore. Llueve para que me detenga un segundo, piense y valore lo que sucede a mi alrededor. Ok, honestamente, llueve porque es su naturaleza, pero cuando llueve es mi compañía. Aunque esté acostada, regresando al sueño.

1 comentario:

Anita dijo...

yo también escuché la lluvia y me volví al país de los sueños jejeje
y siempre digo que la lluvia es maravillosa y cuando te mojas hace cosquillitas en la cara :D