viernes, 27 de noviembre de 2009

das Lächeln


Un hombre baja las escaleras y mira a través del cristal, sonríe a la despeinada chica que está parada del otro lado leyendo un cartel. Aún sonriendo abre la puerta (que también tiene cristal) y sale.

- Eres la primera persona que me saca una sonrisa en todo el día. -
- ¿Ah sí? ¿Qué hice? -
- Nada! Estar parada detrás del vidrio... -

Se dicen adiós y cada uno toma su camino.

(Y me desbaraté. AMO las sonrisas colgate. En verdad. Y lo mejor, mi buen humor me permite apreciarlas.)

2 comentarios:

Anita dijo...

hacer felìz a otro también te hace feliz.
y esa felicidad dura tanto como la pasta colgate total 12 usada tres veces al día, es decir TODO EL DÌA
(soy fan de la pasta no crean que es comercial)

marko dijo...

no entiendo... es un debraye tuyo? un sueño? o te pasó de verdad?